4ªPARTE UN LUGAR POR DESCUBRIR


Dejar la maleta en recepción del hotel e irme a deambular por la ciudad.
Lo primero, unos zapatos bajos. Mis pies echaban humo después de estar muchas horas de viaje y mis pobres francesitas estaban quemadísimas; así que en el primer establecimiento que encontré, me los compré, me los pusé y tiré las mías en la papelera de la puerta.

Mediodía de una ciudad cualquiera en un día laboral son muy parecidas, si además le añadimos que está de cara al mar, pues más todavía.

Hice algunas fotos de los alrededores, hasta que mi propio cansancio hizo mella en mí. Me senté en una terraza de una cafetería y allí me puse a gestionar parte de trabajo con el móvil y iPad. Es la ventaja de mi profesión, puedo cambiar de lugar de trabajo y parecer que estoy de vacaciones.

Por fin en el hotel, ducha, deshacer la maleta y ver el programa previsto para el fin de semana. Una suerte tener esta vista desde mi habitación.
Ahora........... a descansar.....

Reto 11/365




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